Podemos dividirlas en tres tipos:
-macro: simples lentes de aumento, que permiten una mayor ampliación o un mayor acercamiento. Su potencia se mide en dioptrías, y para una compacta necesitaremos de al menos 4 para que se empiece a notar el efecto.
-angular: lente que disminuye la focal mínima de la cámara. Necesaria para sacar en interiores o tomar mayor ángulo en paisajes. Se indicará su potencia como un número multiplicador decimal y menor que 1: 0,75x indica que convierte un angular de 35mm en uno de 26mm.
-tele: lente que aumenta la focal máxima de la cámara. Para acercarse más en fotografía o sacar detalles más pequeños. En este caso el multiplicador será superior a 1: 1,8x convertirá una focal de 105mm en 189mm.
Nótese que normalmente las lentes conversoras deben usarse sólo en su gama de uso, es decir: la macro en posición de macro, la angular en el extremo de menos focal del objetivo, y la tele en el extremo de más focal. Cualquier otro uso podría derivar en problemas de enfoque o viñeteos.
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