Antes de nada: no os fiéis demasiado de mi porque mi experiencia con réflex es pequeña.
El 17-85 es un objetivo con críticas regulares, pero probablemente sea el mejor de los que se ofertan con los paquetes básicos de Canon. Yo lo adquirí con una Canon 50D y hasta ahora estoy satisfecho.
Viniendo de una compacta, la calidad es de otro mundo. Comparando con otros objetivos (mucho más caros) se agradecería un poco más de luminosidad, y menos aberraciones en angular.
La construcción es buena, sin rebabas ni nada de eso, aunque tampoco es de la línea 'L'. Lástima que no se incluya un parasol. La parte anterior no rota al enfocar, luego se puede acoplar un filtro polarizador (muy importante). No tiene holguras y el tacto de los mandos es bueno.
El enfoque es rápido y por lo general preciso. Sólo titubea un poco con poca luz o con horizontes con poco contraste, pero raramente falla. Dispone de una ventanita que indica la distancia de enfoque, útil. Puede enfocarse manualmente incluso en modo autofocus, lo que permite ajustar el enfoque en casos complejos.
La definición es buena, aunque pierde un poco en las esquinas y en angular. La calidad óptica es notable.
Sobre todo, cuesta un tercio de los de la serie 'L'. Creo que tiene una excelente relación calidad precio. Y es una buena lente para llevar a un viaje.